Tercera negativa de la Comisión Europea a una concentración de compañías aéreas para defender a consumidores


Acabamos de conocer la prohibición de que una conocida compañía aérea de bajo coste adquiriese una compañía de su misma nacionalidad. Es la tercera negativa desde 2004 a una operación de concentración entre compañías aéreas; durante este tiempo la Comisión ha examinado 15 fusiones y alianzas varias en el sector del transporte aéreo. Precisamente dos de las tres negativas afectan a las las compañías implicadas (de nacionalidad irlandesa) en esta última negativa.

Es la tercera vez en cinco años en que se presenta ante la Comisión la realización de dicha operación de concentración económica entre compañías irlandesas (dos negativas y una retirada). La primera vez que se pronunció sobre esta cuestión supuso una novedad respecto a anteriores casos de concentración. Fue la primera vez que la Comisión evaluó la concentración de las dos principales compañías aéreas en un solo país; asimismo, fue la primera vez que la Comisión tuvo que evaluar una concentración de dos de bajo coste; además, el número de rutas superpuestas no tenía precedentes en comparación con los casos anteriores de concentraciones de líneas aéreas. 

En esta tercera ocasión la Comisión Europea ha prohibido la operación con base en que habría perjudicado a los consumidores mediante la creación de un monopolio o una posición dominante en 46 rutas en las que, en la actualidad, las compañías aéreas implicadas compiten intensamente entre sí. Se afirma que esto habría reducido elección y, muy probablemente, habría dado lugar a aumentos de precios para los consumidores que viajen en estas rutas. 

Sobre este tema, el Vicepresidente de la Comisión encargado de la política de competencia, Joaquín Almunia, dijo: "La decisión de la Comisión protege a más de 11 millones de pasajeros irlandeses y europeos que viajan cada año desde y hacia Dublín, Cork, Knock y Shannon Para ellos, la operación propuesta habría probablemente llevado a tarifas más altas. Durante el procedimiento, se han tenido muchas oportunidades para ofrecer soluciones y para mejorarlos. Sin embargo, esas propuestas son simplemente insuficientes para resolver los problemas de competencia muy graves que dicha adquisición se haya creado en no menos de 46 rutas".

En este ocasión la Comisión Europea ha tenido en cuenta determinados cambios que se han producido en el mercado desde la primera notificación (2007). Así, por ejemplo, se ha reforzado la posición de dominio colectiva de las dos compañías implicadas (ha pasado del 80% en 2007 al 87% en 2012), y las rutas se han elevado de 35 a 42. Este hecho, junto a la realidad que supondría la existencia de fuertes barreras a la entrada de competidores, ha justificado una nueva negativa por parte de la Comisión Europea.